Comenzando con la remota era prehispánica, se hace una pausa en la fundación española de la ciudad y abundan después los más variados conceptos sobre el sitio geográfico, la belleza del paisaje y el carácter de la arquitectura. La creación urbana deja una profunda y creciente cicatriz en las faldas del Chachani. Son las canteras de las que, año tras año, se obtiene el sillar que ha dado a Arequipa la definición de "La Ciudad Blanca". "Crecen solitarios los penachos de cactus grises; pero en el regado valle se alza la sonriente ciudad...", dice James Orton. "La ciudad más representativa y pintoresca de la República", afirma el ilustre historiador Basadre. "Hay mucha inspiración en los médanos..." anota Eugenio Larrabure y Unanue. Raúl Porras dice que Arequipa "no es ya cuna de arrebatos y de furias, como otrora, pero sigue incólume su gallardía del paisaje, fuente de permanente impresión de júbilo y de luz"... "Se entretejen lo urbano y lo campestre". Y el poeta Percy Gibson nos habla de "fría serenidad en las alturas/ y de fuego repletas las entrañas...".
IMAGEN Y LEYENDA DE AREQUIPA. ANTOLOGIA 1540-1990
Autor
RIVERA MARTINEZ, EDGARDOEditorial
FUNDACION M.J. BUSTAMANTE DE LA FUENTEISBN
Año de edición
1996
Páginas
697